El parapente es un derivado del paracaídas. Los paracaidistas, al querer permanecer más tiempo en el aire y tener mayor margen de maniobra, evolucionaron la forma de las alas innovando continuamente.
A mediados de los años 60, Domina Jalbert creó el paracaídas de celdas: pequeños compartimentos que permiten al viento inflar la vela. Este nuevo diseño permitió a los paracaidistas despegar desde terrenos inclinados, lo que posteriormente dio nombre al "parapente".
Hoy en día, el parapente se practica como actividad recreativa o deportiva. Para manejarlo, no solo hay que entender el funcionamiento del equipo, sino también el de las corrientes de aire.
Sin embargo, aprender a volar en parapente es relativamente fácil, por lo que está al alcance de todos a partir de los 14 años y sin límite de edad máxima.
No hace falta ser especialmente deportista, e incluso las personas con vértigo pueden vivir esta experiencia. ¡Sin contacto con el suelo, ¡la sensación de vértigo desaparece!
No dudes en contactar con una escuela de parapente cerca de ti. Si nunca has volado y te interesa esta actividad, podrás realizar tu bautismo de aire en parapente acompañado de un instructor.
Si la experiencia te gusta, ¡puedes continuar con una formación de piloto!
Tus primeras clases de parapente como piloto consistirán en despegar del suelo. Despegar implica aprender a preinflar e inflar la vela, manejar los frenos, controlar la posición del cuerpo... En definitiva, no esperes unirte a las aves sin unos conocimientos teóricos y prácticos.
Para ser completamente autónomo, también aprenderás a identificar las condiciones meteorológicas favorables (o no) para un vuelo en parapente, y cómo maniobrar la vela en el aire para prolongar el vuelo.
En resumen, lo que necesitas para volar es: ganas y motivación. ¡Tienes todas las cartas, y si de verdad quieres volar, volarás!
Todos hemos soñado alguna vez con surcar el cielo, revoloteando entre las nubes. El escenario varía: ciudades, paisajes espectaculares, campos... pero la sensación es la misma.
Un increíble viento de libertad te eleva, y al despertar, anhelas revivir esas sensaciones. Pero no hace falta dormirse: ¡el vuelo en parapente te permite volar ¡totalmente despierto!
Solo tendrás que disfrutar de las vistas panorámicas de tu ciudad, región, país... ¡o incluso del extranjero!
No dudes en plantear tus dudas en nuestro foro de parapente, compartir anécdotas o hablarnos de tu pasión.
¡Nos vemos en las nubes!
