Conducir un Ferrari en España

3. Sensación de poder

El ser humano es impredecible y a veces le produce placer aspectos de la vida insospechados. Sí es verdad que en general, lo que no podemos tener es lo que más nos apetece y acceder a ese deseo, aunque sea efímero, produce una sensación insuperable.

Con los coches de lujo pasa lo mismo. Sabes que solo lo vas a conducir durante un breve periodo de tiempo, pero lo disfrutas tanto y te sientes tan especial y poderoso, que nada más importa a tu alrededor. Solo tú y el cochazo que estás conduciendo.

5. Llévate a tus amigos

¿Qué es un capricho si no puedes fardar de ello delante de tus colegas?

Normalmente, cuando adquieres cualquier paquete de conducción en un circuito, te dejan ir acompañado de algunos de tus amigos o familiares. No dentro del coche, eso solo está reservado para algunos paquetes, porque en el interior tan solo vas tú y el instructor.

Sin embargo, estos pueden estar dentro del recinto, viendo como conduces el Ferrari, animándote y vitoreándote. Si ya de por sí estarás disfrutando como un loco, cuando veas a tu entorno más cercano emocionados por la experiencia, te gustará todo aún más.