No hace falta saber demasiado, simplemente que es una opción diferente para explorar los alrededores de Lisboa y que os va a sorprender gratamente. ¿Por qué? Pues porque muchas de las localizaciones en las que se adentran estas rutas son poco conocidas y conceden multitud de alicientes.

Es una actividad excelente para compartir en familia o con tu pareja ya que todas ellas están dirigidas a principiantes, por lo que es el mejor regalo posible independientemente del momento. Además, aparte de que se celebran en diversos emplazamientos distintos entre sí (litoral, bosques, montaña, finca), en muchos casos, la actividad principal, el paseo preceptivo, se compagina con otras experiencias satisfactorias que incluyen una cata de vino, una comida u otros medios de transporte como el ferry.

Sin ningún tipo de discusión, contratar uno de estos itinerarios es todo un acierto. Únicamente tendréis que pensar con quién.

¿Dónde están los mejores sitios para montar a caballo en Lisboa?

• Parque Natural de Sintra-Cascais: Las excursiones programadas en este grupo parten desde Quinta da Marinha, un vecindario rural ubicado a los pies de la Reserva Natural de Sintra-Cascais, en la parte meridional del parque nacional. A tan sólo 10 minutos en coche del centro de Cascais, Quinta da Marinha resalta por estar rodeada de una fauna y una flora de enorme heterogeneidad y por regalarnos unos atardeceres de postal.

• Playa de Guincho: Seguro que los apasionados del surf y del kitesurf conocen plenamente las ventajas de acercarse a esta preciosa playa expuesta a la fuerza del Océano Atlántico, encajonada entre las paredes verticales de la Sierra de Sintra, dando lugar a una singular depresión que desciende progresivamente hasta la orilla entre dunas de considerable tamaño. Las rutas que se configuran en esta zona siguen los senderos cercanos a la costa, con algunos tesoros como el Acantilado de Azenhas do Mar, con su preciosa localidad en lo alto, el imponente Cabo de la Roca o la colindante Playa de Cresmina.

• Bucelas: Esta pequeña freguesía perteneciente al municipio de Loures, al norte de Lisboa, destaca por ser una de las grandes regiones vinícolas de todo Portugal. Enclavada entre verdes colinas y estrechos valles, sus característicos suelos calcáreos convierten Bucelas en el lugar idóneo donde cultivar la uva blanca, dando como resultado un vino de Arinto, la cepa principal plantada en los viñedos, con denominación de origen. A lo largo de su superficie se reparten varias fincas, algunas con bodega, en las que se llevan a cabo tranquilas excursiones a caballo, concretamente en Cavalos da Vinha, ideales para explorar el recinto y conectar con la naturaleza.

• Península de Tróia: 25 kilómetros de costa recorren Tróia frente a la ciudad de Setúbal, flanqueada al oeste por el Atlántico y al este por el estuario del río Sado. La única ruta que se oferta por estos lares transcurre por los arrozales junto al mar y por las reservas de Herdade da Comporta, sin embargo, también se pueden visitar otros sitios de interés como las ruinas romanas, un antiguo saladero de pescado que se mantuvo en activo entre el siglo I y el IV, o el peculiar Porto Palafita da Carrasqueira, construido sobre unos pilares de madera insertados en el barro.

¿Qué tipos de actividades con equinos se pueden hacer en Lisboa?

- Bautismo de equitación: Como su nombre señala, esta actividad está indicada para introducir a los más pequeños en esta disciplina. A lo largo de media hora, aprenderán desde ajustarle las monturas a un caballo a poner en práctica algunas de las técnicas básicas interiorizadas en un paseo por un bosque cercano al centro hípico.

- Paseos en pony para niños: No exceden los 20 minutos de duración y están orientadas a niños de hasta 12 años. Aprovechan el entorno en el que se desarrollan, una de las fincas de Bucelas, ya que suponen una primera toma de contacto con la naturaleza, permiten interactuar con otros animales que se encuentran en el perímetro de la parcela y son idóneos para iniciarse en este mundillo mediante la utilización de ponys en vez de corceles.

- Trayectos a caballo de diferentes duraciones: Este es el principal criterio de clasificación a la hora de categorizar las clases de excursiones a caballo que hay en Lisboa. De manera usual, los paseos aptos para los más pequeños suelen tener una duración inferior a los de adultos, ya que oscilan entre los 20 y los 30 minutos. Efectivamente, alguno de los recorridos concebidos para las personas adultas empiezan a partir de los 60 minutos y se extienden hasta un máximo de dos horas.

- Rutas combinadas con otras actividades: Dos de las tres compañías que dotan a Lisboa de circuitos a caballo, entre su abanico de alternativas, ofrecen propuestas que unifican dos o más experiencias distintas pero que, a su vez, se complementan perfectamente. Una de ellas plantea la posibilidad de una cata de vinos tras un tranquilo paseo por los viñedos de una finca; otra fusiona el turismo ecuestre y el gastronómico al sugerir una comida después del recorrido; y la última se compone de una visita guiada por Setúbal, un viaje en ferry hasta la Reserva Natural de Comporta, y, para finalizar, una ruta por la Península de Troia a lomos de un equino.

¿Qué requisitos son necesarios para hacer un paseo a caballo en Lisboa?

Para la mayoría de los trayectos en las cercanías de Lisboa que emplean equinos no es necesario acreditar experiencia previa ni se requiere tener una condición física determinada. Sí sería aconsejable tener un mínimo de experiencia para las travesías que discurren por la arena, aunque, repetimos, no es un requisito indispensable.

En términos generales, se recomienda no sobrepasar los 120 kilos de peso e ir acompañados de un adulto para todos aquellos con edades comprendidas entre los 10 y los 15 años. Por otro lado, los paseos en pony y los bautismos ecuestres están acotados a niños de hasta 12 años y con un límite de 60 de kilos.

¿Son seguros estas excursiones?

100%, como el título de una canción de Sonic Youth. Hay varios factores, inseparables, que garantizan la seguridad. Primero, los paseos por las inmediaciones de la capital portuguesa son cortos, de una duración moderada, por lo que no existe riesgo alguno de que el corcel o el jinete puedan fallar o mostrar signos de flaqueza.

Segundo, todas las compañías que operan en Lisboa dotan a la experiencia de la presencia de un guía cualificado, auténticos profesionales del sector, que supervisan la actividad de principio a fin, liderando o cerrando el séquito de participantes.

Ello nos lleva, inevitablemente, al tercer punto: sin excepción, todos los instructores que trabajan en las agencias de paseos a caballo por Lisboa imparten, antes de la salida, un breve briefing con algunas pautas esenciales para el manejo del animal.

Por último, no menos importante, todas las empresas proporcionan material homologado, de uso personal, como un casco de protección para la cabeza y una montura testada (con sus respectivos estribos, cantinas, fuste, argollas, etc.).

¿Qué tengo que llevar el día de la actividad?

Para subirse a un caballo, es conveniente llevar ropa cómoda, resistente, que no quede demasiado ceñida en aras de facilitar los movimientos y la flexión de las piernas. Valdrían unos pantalones vaqueros o unas mallas. Para la parte de arriba, como Lisboa detenta un clima mediterráneo suave, bastaría con una camiseta o un polo, salvo durante los meses de invierno, en los que sería deseable cubrirse con una capa extra como un chaleco o una chaqueta. Para terminar, imprescindible, botas de montaña o zapatillas deportivas que no resulten molestas y se acoplen bien a los anclajes.

¿Cuándo es la mejor época para hacer una ruta a caballo en Lisboa?

Al gozar de una temperatura apacible, cualquier época del año es favorable para efectuar un paseo a caballo en Lisboa. De todas formas, dado que todas las excursiones acontecen por la costa o por parajes con agreste vegetación, lo más lógico, y acogedor, es realizar estos recorridos en primavera y verano, coincidiendo con el calor, ya que en el resto de las estaciones son habituales las lluvias y un frío austero.

Contrata ya tu excursión a caballo por la ciudad de la luz y disfruta de una de las experiencias más alucinantes que vivirás jamás.