Nuestro principal consejo es que disfrutéis y dejéis la mente en blanco. A priori parece sencillo pero no lo es teniendo en cuenta todas las implicaciones que hay detrás. En verdad, la conjugación de dos factores es clave para entender el funcionamiento de esta magnífica disciplina: el lugar donde se desarrolle y el propio vuelo en sí.

Vamos a explicarlo con ejemplos. Sin desmerecer, no es lo mismo un Bentley con todo lujo de detalles, elegante, con potencia, que un coche de los años 80 desvencijado, sin puertas y con el motor fundido. Con ello nos referimos a que hay una gran diferencia entre uno y otro y, puestos a elegir, nos quedamos con el modelo de la marca inglesa. Lo mismo ha de suceder con algunas actividades al aire libre, no es igual realizarlas en, póngase el caso, un vertedero que rodeados de un paraje deslumbrante. De ahí la importancia del centro de Portugal, concretamente en la demarcación de Lisboa. Sintra, Cascais, Setúbal, etc., esconden los secretos mejor guardados de la nación.

Si, además, lo que se lleva a cabo en estos emplazamientos es parapente tenemos la combinación ganadora. Según los testimonios de los que lo han probado alguna vez, las sensaciones que uno siente son apabullantes, no se pueden comparar con nada. Ven a tu centro especializado en las inmediaciones de la ciudad de la luz y pregunta sin compromiso por las tarifas y los horarios. Te informarán con todo gusto, a ti que eres uno de los que está deseando iniciarse en esta fascinante aventura, a ti que tienes el espíritu y la iniciativa de un auténtico valiente.

¿Dónde están las mejores zonas para volar en parapente en Lisboa?

• Sintra: Esta es una de las ciudades más bonitas de Portugal, mundialmente conocida, sobre todo, por las tres joyas arquitectónicas situadas en el exterior del núcleo urbano de la ciudad. A las afueras, en pleno Parque Natural de Sintra-Cascais están situados el Palacio Nacional de Sintra, el de la Pena y el de Quinta da Regaleira. Ya sabéis por qué muchos saltos deciden sobrevolar esta región, las vistas sobre estos tesoros que mezclan el estilo neogótico, neorromántico y neomanuelino, son indescriptibles. Al margen de estos majestuosos edificios, es sobrecogedor mantenerse a flota en el aire mientras contemplas las colinas de la serranía. El colofón a este recorrido es aterrizar en Praia Grande, cuna para los aficionados al bodyboard y al surf. Lo que no imaginabais es que en el extremo sur de esta playa se localiza un antiguo yacimiento de dinosaurios. Quién sabe, a lo mejor Jurassic Park se rodó realmente en Portugal.

• Parque Natural da Arrábida: Las ofertas de la otra empresa parapentista en Lisboa tienen como objetivo primordial recorrer la maravillosa costa de Setúbal, con su fina arena blanca y sus aguas cristalinas, para, después, llegar hasta el Parque Natural da Arrábida y atravesarlo de punta a punta mientras te estremeces contemplando desde las alturas la fauna y la flora autóctona que habitan en la reserva. Arrábida, y todo su ecosistema, es uno de los espacios protegidos en la nación debido, especialmente, a la preservación del maquis mediterráneo, una especie de arbusto no tan común en estos lares.

¿Qué tipos de vuelos hay disponibles en Lisboa?

- Bautismo en tándem de 30 minutos : Los trayectos en parapente parten de esta premisa básica, es decir, son saltos aptos principiantes, para cualquier persona con independencia de que posea experiencia o no. Atendiendo a las corrientes aéreas que haya, las cuales son fluidas en esta comarca de Portugal, el itinerario tiene una duración de entre 20 minutos y media hora. Asimismo, como su nombre indica, son vuelos para dos personas, un instructor y un pasajero, en los que el primero acopla al segundo a su cuerpo por medio de un arnés y, a raíz de ahí, se convierte en su sombra. Todo (o casi todo) lo que haga el monitor tendrá un efecto inmediato en la movilidad de su pupilo.

- Añade fotos, vídeos o ambas : Ya habíamos dicho en reiteradas ocasiones que no tiene sentido contratar esta actividad sin añadir fotografías de la jornada, vídeos o ambas. Y más cuando lo que tenemos frente a nuestros ojos es la preciosa estampa del litoral lisboeta o de la Sierra de Arrábida o Sintra-Cascais. Por pragmatismo, se suele emplear un stick o palo selfie para inmortalizar el instante e, incluso, en algunas circunstancias, un piloto externo a la pareja desciende junto a ellos y graba desde su posición externa.

¿Quién puede realizar esta actividad?

Los criterios que aplican las dos compañías que brindan este servicio en la región de Lisboa difieren fundamentalmente en lo relativo a la edad de los participantes. Una de ellas lo fija en 5 años, cuando generalmente suele ser a partir de 6, mientras que la otra la estipula en un mínimo de 10 años, en cuyo caso deben ir acompañados del padre, madre o tutor legal del menor para firmar la autorización pertinente.

En lo que sí parecen estar de acuerdo es en cuanto al peso de los solicitantes. A los que se encuentren en la franja entre 25 y 120 kilos tienen permitido realizar la actividad. Esto es debido a que los equipos para volar soportan un peso específico definido por el fabricante del aparato, usualmente con un tope máximo de 240 kg.

¿Son seguros los saltos en parapente en Lisboa?

No tendréis que preocuparos por nada. Prometemos que así es. Que no os genere rechazo o inquietud de ningún tipo porque todo está, desde el minuto uno, bajo control. Fundamentalmente por tres razones, todas relacionadas. Los monitores de estas escuelas acreditan una dilatada trayectoria, dedicados a su profesión por décadas, especialistas en la morfología de los territorios que se traspasan y en la climatología imperante en el condado. Como no podía ser de otra manera, ellos serán los responsables de impartir una formación teórica preventiva, breve, previa al comienzo del despegue.

Por último, los materiales que cada compañía usa. Desde la silla, hasta la radio o el casco, pasando por las cuerdas o el paracaídas de emergencia, todo está en perfecto estado de conservación, todo es revisado por nuestro equipo de expertos en aras de garantizar la seguridad. Lo dicho, cero nerviosismo.

¿Qué tengo que llevar el día de la actividad?

En primer lugar, es recomendable ponerse un calzado que cierre bien, ya sea deportivo o de montaña, a fin de que no baile o se balancee en torno al pie durante el trayecto, de esta manera evitaremos que se caiga. En sintonía con esto, se trata de estar cómodo, por ello no estaría de más venir con ropa flexible, no excesivamente apretada, que permita ejecutar toda clase de movimientos con libertad absoluta.

Otro aspecto que hay que sopesar considerablemente depende en exclusiva de la temperatura, ya que, por ejemplo, en un día brumoso o frío, es preferible traer una sudadera o una chaqueta antes que quedar totalmente expuesto. Recordemos que en invierno se alcanzan mínimas diurnas de 9ºC en Lisboa, aparte de la previsión constante de precipitaciones, por lo que no es absurdo ponerse encima una capa extra.

¿Cuándo es el mejor momento para hacer parapente en Lisboa?

Como es un deporte completamente supeditado a la meteorología, lo que importa no es tanto la época del año como que se cumplan ciertos condicionantes a fin de que la actividad transcurra con normalidad, esto es, que no llueva o niega y que no sople un viento extremadamente fuerte. Con ello se garantiza una duración de vuelo de, al menos, quince minutos.

Aunque, si bien es cierto que es más fácil que en los meses de invierno se reproduzcan con más frecuencia las anteriores limitaciones. Por otra parte, debemos considerar que las zonas de Sintra y Setúbal detentan un clima mediterráneo con influencia oceánica y mediterráneo interior, respectivamente. Esto significa a lo largo del año conviven veranos secos y calurosos con inviernos suaves, parcialmente nublados. Entonces, claramente, el mejor momento para efectuar parapente en los alrededores de Lisboa sería de mayo a septiembre.

¿A qué esperas? ¡Anímate a dar el salto en la capital portuguesa!