Dicen que para sentirte repleto de felicidad tienes que haber probado a saltar en paracaídas a 4.000 metros sobre el nivel del mar. Y puede que quien acuñó esta noción esté exagerando, pero lo cierto es que, en la actualidad, os habréis cansado de oír a compañeros u familiares confesar que realizar esta actividad es toda una catarsis en sí.

Esta disciplina se práctica en la provincia de Barcelona exclusivamente en la comarca del Bages, en concreto en el aérodromo de Sant Fruitós de Bages. Esta localidad catalana tiene varios alicientes que la ensalzan frente a otros emplazamientos donde también se celebra este deporte: tanto su espléndido clima como los parajes naturales que nos podemos encontrar, de una belleza exultante. De la serranía de Monserrat, con el famoso Monasterio coronándola, al Castillo de Cardona pasando por los lagares entre las viñas, entre otros, la cantidad de tesoros escondidos en la región es incalculable.

Aconsejamos comprar un bono de regalo para tu pareja o para quien tú quieras o acudir con un grupo de amigos dispuestos a someterse a emociones fuertes. Las sensaciones son indescriptibles, tendrás que comprobarlo en directo para saber realmente el desafío al que te enfrentas y si lo compras para regalo, será un viaje mágico que siempre recordará el afortunado en recibirlo.

Si tienes dudas, con este vídeo estamos seguros que se disiparán:

¿Qué tipos de saltos en paracaídas están disponibles en Sant Fruitós de Bages?

Salto tándem a 4000 metros: la única modalidad que se promociona en esta localidad es este tipo de descenso que atesora, fundamentalmente, dos ventajas: son aptos para gente sin experiencia previa, supone un bautismo para principiantes al estar supeditados a los designios de un instructor cualificado que es quien ejecuta las acciones pertinentes; por otro lado, otro plus es que cubre una distancia mayor a los habituales 3000, lo que propicia más margen de tiempo para disfrutar de las distintas etapas de las que consta esta fórmula e intensifica el resultado final.

¿Qué fases se atraviesan en el skydiving?

Es nuestro deber recordar que el alumno permanece unido al cuerpo del monitor desde que el avión despega hasta la conclusión. Dicho esto, vayamos ahora a enumerar los ciclos de un salto:

- Caída libre: tras embarcar a la aeronave, transcurridos alrededor de 15 minutos de trayecto, alcanzada la altura estimada en la vertical del aeródromo, la puerta de la avioneta se abre y el instructor se lanza al vacío. Es el instante en el que se superan velocidades de 200km/h durante los 60 segundos que dura la caída libre. Sentirás cómo la adrenalina se dispersa abruptamente por cada poro de tu piel.

- Descenso: cuando el monitor lo estime oportuno pulsará el mecanismo para desenrollar el paracaídas e iniciar un lento descenso a lo largo de 5 minutos, momento idóneo para dejarte seducir por las maravillosas vistas aéreas, con las montañas de Montserrat mezclándose con el azul del Mediterráneo, o divisar en la lejanía el vanguardista skyline de Barcelona.

- Aterrizaje: las innovaciones en estos dispositivos delegan esta maniobra íntegramente en la figura del instructor, quien se encarga de tocar tierra con precisión milimétrica en el lugar designado a tal efecto. Además, se aterriza dentro del perímetro del aeródromo, con lo cual se ahorra algo de tiempo en los desplazamientos posteriores.

¿Qué requisitos hay que cumplir para poder saltar?

Los requisitos que exige la única empresa que opera en esta provincia barcelonesa son idénticos a los que reclaman la mayoría de las compañías a nivel nacional. Son requerimientos relativos a la edad, a la complexión física y a la altura de los individuos solicitantes.

Así, con carácter oficial, el salto está permitido para todos aquellos mayores de 16 años. Para la franja de edad comprendida entre 16 y 18 años, es obligatorio que la persona venga acompañada al centro de su padre, de su madre, o, en su lugar, de su tutor legal. Sin excepción, el/la contratante tendrá que justificar una estatura mínima de 1,20 metros y hallarse en un peso contemplado entre 35 y 100 kilógramos.

¿Es seguro saltar en paracaídas en Sant Fruitós de Bages?

No os podéis imaginar cuánto. Las estadísticas así lo corroboran. Confluyen dos factores que avalan la seguridad extrema en el desarrollo de la actividad. Antes que nada, el material siempre se encuentra en perfecto estado de conservación. Dos son los elementos esenciales que intervienen en el salto: el paracaídas normal y otro auxiliar. En los vuelos biplaza se emplea un paracaídas doble especial, de tamaño superior, que funciona del siguiente modo: este conjunto dispone de un arnés de sujeción con anclajes que se amarran a las piernas y a los hombros del pasajero, dicho arnés es acoplado a su vez al propio paracaídas del monitor, constituyendo, así, un todo, una pieza indivisible. Por su parte, el de reserva actúa ante imprevistos: si al vencer una altitud predeterminada el paracaídas principal no se despliega, este sistema activa automática e inmediatamente uno de emergencia.

El segundo aspecto que debemos tener presente se refiere al staff que trabaja en estos espacios. En el caso particular de la casa que brinda este servicio en la región, aparte de ser el único centro de la provincia con licencia para par, confía en un equipo de profesionales con la friolera de más 30000 saltos tándem a cuestas. Al margen de su dilatada experiencia, estos profesores, muchos de ellos asiduos de las competiciones, se han titulado en las federaciones más prestigiosas, por lo que están sujetos a una serie de normativas que han de cumplir al pie de la letra. Su misión, en definitiva, es la de gestionar los riesgos potenciales reduciéndolos al mínimo.

A todo esto, que garantiza la fiabilidad, habría que añadir un catalizador específico que colabora positivamente en el rumbo de la actividad: Sant Fruitós de Bages goza de una magnífica meteorología, con 320 días de sol al año en la zona de salto.

¿Cómo llegar al Aeródromo desde Barcelona?

Existen diversas posibilidades para llegar al recinto desde la ciudad condal, incluso haciendo una ruta en bicicleta. La primera, y más convencional, es en coche.

Para ello, una vez que estemos en la Autovía C-16, habremos de coger la Salida 56 y continuar por la Carretera de Berga en dirección a Manresa. Tras aproximadamente 2 kilómetros de recorrido, una señal nos indica una salida a la derecha con el cartel Aeródrom- Escola de Paracaigudisme. A partir de ahí, simplemente es necesario seguir las indicaciones hasta la entrada al aeródromo.

Si vienes por el Eix Transversal, las directrices son básicamente idénticas. Hay que bajar a la C-16 hacia Manresa, tomar la Salida 56 y hacer exactamente el mismo itinerario antes descrito.

Otro medio de locomoción que podemos utilizar es el tren, en combinación con el metro o el bus dependiendo del punto de partida. Lo más sencillo es subirte al FGC R5 (Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya) que sale de Plaza de España con destino a Manresa Alta, donde la empresa de multiaventura presta un servicio gratuito de recogida en esta estación.

Por último, si aterrizaste en el Aeropuerto del Prat, hay dos alternativas: en la Terminal 1, lo más rápido es dirigirte al metro y tomar el L9S hasta la Estación Europa/Fira, efectuar un transbordo al convoy FGC R5 hasta la parada de Manresa Alta; desde la Terminal 2, nuestra recomendación es coger la línea R2N de Renfe, detenerte en Sants, hacer un transbordo a la línea R4 y continuar hacia Manresa.

Contrátalo ya, tendrás la impresión de estar flotando eternamente en el cielo.