¿Cansados de surfear en los mismos lugares? Por contra, nunca habéis surfeado pero queréis hacerlo en un sitio alejado del turismo masivo, en un paraíso que además de ser eso, edén, sea también un destino desconocido. Pues ahora tenéis la oportunidad de cumplir vuestro sueño de una u otra manera.

Sí, habéis oído bien. Para aquellos que se hayan quedado rezagados vamos a repetir de nuevo. Para todos los que os apasiona surfear o estáis deseando probarlo en algún momento y consideráis que, en cualquier caso, ya ha llegado la hora de hacerlo, os vamos a señalar en el mapa un punto que debéis marcar en rotulador para que no se olvide.

Si no siempre podréis volver a leer esta oferta y localizar algunas de las palabras resaltadas en negrita. Concretamente la siguiente, Nazaré. Apunta bien porque vienen curvas. De sobra es sabido que Portugal es uno de los platos fuertes para toda la comunidad de surferos y para los que no pertenecen a la misma pero quieren aprender y acabar formando parte de ella.

¿Qué tendrá Portugal que no ofrecen otras localizaciones? Tiene un buen clima, agradable, exquisita gastronomía, es relativamente barato, y, cómo no, cuenta con algunas playas donde se reproducen las mejores olas del continente. Así de simple.

¿Y qué tiene Nazaré que lo hace tan singular? Pues a todo lo indicado anteriormente, habría que sumar un sinfín de atractivos que lo convierten en el lugar idóneo para la combinación de visita en vacaciones más surf. Por esta razón, os sugerimos comenzar por una clase colectiva de surf de una hora y media de duración, con un monitor cada 4 alumnos, que dividiremos en grupos según el nivel de los participantes.

Como os decíamos, la actividad estará supervisada en todo momento por un instructor acreditado por la Federación Portuguesa de Surf. Nosotros os facilitamos todo el material necesario, formado por el neopreno y una tabla, vosotros tan sólo tendréis que venir con muchas ganas, vitalidad y energía. ¿Acaso no es lo mismo? Sí pero no.