Practicar deportes extremos te permite descubrir lugares increíbles. El Vignemale es una de las montañas más icónicas y renombradas de la cordillera de los Pirineos.

Más allá de la belleza del macizo y su riqueza natural, su reputación se basa en lo inaccesible de su cara norte, escenario de algunas de las expediciones más destacadas de los últimos siglos. El norte de la Pique Longue y, sobre todo, el prodigioso corredor de Gaube, son dos símbolos del alpinismo en los Pirineos y siguen siendo ascensiones muy codiciadas.

The Vignemale Massif


El macizo presenta dos caras muy contrastadas: a la oscura verticalidad del Piton Carré, la Pointe Chausenque o la Pique Longue, se opone la luminosa y acogedora faz del glaciar de Ossoue.

Su característica forma de herradura, suspendida sobre las nubes, es visible desde cumbres tan lejanas como las del Val d'Aran y el Pallars. Esta gran extensión de nieve, la más importante junto a la de la Maladeta, es tan brillante que parece haber sido colocada allí expresamente para la práctica de deportes de nieve.

Pero ascender en esquí a las cumbres del Vignemale no es tarea fácil... Para alcanzar la cima del glaciar más bello de los Pirineos, deberás abrirte paso entre valles profundos y pendientes pronunciadas. Las dificultades de acceso, el aislamiento, el riesgo de avalanchas y la altitud convierten al Vignemale en una montaleza extraordinaria, y su ascenso en una auténtica prueba para cualquier alpinista experimentado!


Descripción del Vignemale


El Vignemale se sitúa en la región de Bigorra, cerca del circo de Gavarnie. Se accede al macizo por el valle de Gaube desde Cauterets o por el valle de Ossoue desde Gavarnie. Estas dos "puertas de entrada" son accesibles con esquís.

Ambos lados cuentan con numerosos refugios, abiertos tanto en invierno como en verano. Gaube y Bayssellance, dos de los más reputados, permiten dividir la ascensión en dos etapas o enlazar con rutas hacia las montañas de Marcadau y Gavarnie.


Clima


Esta zona acumula las mayores nevadas de todo el Pirineo. Los vientos atlánticos, extremadamente violentos, descargan enormes cantidades de nieve. Esta peculiaridad geo-climática confiere a la región un carácter extremo, incluso inhóspito en áreas expuestas.

Las bajas temperaturas y los cambios bruscos aumentan el peligro y agravan las dificultades topográficas de las rutas.

 Actividad de esquí en los Pirineos



Además, ¡las avalanchas son frecuentes! Destacamos tres zonas especialmente críticas:
  • El acceso a la Hourquette d'Ossoue desde Gaube, que atraviesa las crestas de la Hourquette.
  • La travesía desde el refugio de Bayssellance hasta el glaciar. Solo se recomienda intentarla con buen tiempo. Además, es aconsejable descender 200 metros para encontrar terreno más seguro antes de remontar hacia la morrena.
  • La tercera y más peligrosa es la ascensión completa al precipicio de Ossoue. Su estrechez, longitud y paredes altas lo convierten en una ratonera, imposible de prever la nieve acumulada. ¡Adentrarse aquí es temerario!
También hay que considerar tormentas, niebla y la escasa visibilidad, que complican enormemente la orientación.

 Experiencias increíbles



En conclusión, el Vignemale es un paraje de belleza excepcional y una de las grandes joyas de los Pirineos franceses, pero su ascenso está reservado a montañeros expertos y amantes de la alta montaña.