Según con quién viajes, a veces resulta complicado decidir un destino para que todos los componentes del grupo queden conformes con las actividades que se van a contratar y los lugares que se van a visitar. Almería sin embargo ofrece todas las posibilidades pues abarca los gustos de todos: mar, costa y paisajes para no olvidar. Por eso, para los más aventureros existe un plan perfecto desde donde puedes aunar todo lo más característico de la tierra almeriense… ¡un vuelo en parapente!

Una experiencia de estas características es impresionante. Siempre acompañado de un piloto que te llevará por el cielo de unos paisajes que se te quedaran en la retina por mucho tiempo: los acantilados, las murallas, parques naturales bañados por un Mediterráneo único hace que volar en parapente en la provincia sea (más si cabe) único.

¿Dónde volar en parapente en Almería?

- A algo más de 100 kilómetros de la capital, en el pueblo de Huércal-Overa puedes saltar en parapente en un “vuelo libre”, por todo el levante de la provincia, disfrutando de la adrenalina y las vistas sin tener que preocuparte de nada más, ya que el profesional se ocupará de cualquier maniobra. También con ellos puedes matricularte en cualquiera de los cursos que tienen para conseguir autonomía con el parapente, incluso convertirte en un profesional si así lo deseas. Puedes comenzar con un bautismo e ir subiendo de nivel. Dependerá sobre todo del tiempo del que dispongas, pero por lo general, siempre te dan facilidades para las clases prácticas en las que seguirás descubriendo lugares maravillosos desde las alturas como Mojácar.

- El Campillo tiene la suerte de formar parte de uno de los pueblos que residen alrededor del Parque Natural del Cabo de Gata, uno de los más importantes de todo el país. Por esto (y mucho más) sobrevolarlo en parapente es una experiencia que si tienes oportunidad, no deberías perderte. Te ofrecen dos tipos de vuelo, uno tándem junto a un instructor que te acompañará y te irá explicando todos los lugares por los que iréis pasando. Es perfecto para aquellos que quieran tener su primera experiencia con un parapente y quieran probar la sensación. La otra opción es solo apto para personas con experiencia, que tengan su propio equipo de vuelo y quieran volar por su cuenta con nuestras recomendaciones. Además, te facilitan un alojamiento realmente próximo a la zona de despegue, para que no tengas que preocuparte de que tengan que llevarte al punto acordado; “de tu habitación al cielo” ¿qué más puedes pedir?

- Si vas a estar cerca de Almería capital, aquí podrás optar por diferentes vuelos, todos increíbles ya que la ciudad cuenta con unas playas increíbles que desde las alturas se aprecia mejor toda la belleza. Una de ellas es playa de Palomeras. Desde aquí puedes realizar un vuelo biplaza con un instructor, que además te ofrecerá la posibilidad de hacerte un reportaje fotográfico y un vídeo; o si ya tienes experiencia, un salto en parapente individual.

En cualquier caso, la empresa te facilitará el material así como unas nociones básicas de la actividad que vas a realizar, haciendo especial hincapié en la seguridad que hay que respetar sin excepción a rajatabla.

- También en la ciudad puedes realizar cursos de parapente adaptados a diferentes niveles, desde el de iniciación hasta el que te convierte en un profesional para volar con total autonomía, además de aprender conocimientos de aerodinámica y meteorología. Para las clases prácticas, monitor y alumno iréis conectados a través de unos micrófonos que vienen incorporados en el casco de seguridad, para que siempre estéis en contacto y siguiendo las instrucciones que te van dando.

- En la capital almeriense puedes hacerte socio de un club especializado en este tipo de cometas gigantes, pero también hacer bautismos de vuelo por lugares espectaculares de Almería. Dependiendo del grado de emoción que estés buscando podrás elegir entre unos destinos u otros. Algunos de los más frecuentados por estos son la sierra de Alhamilla o Gainos, por donde volarás a unos 150 metros, lo cual es perfecto para una primera experiencia en parapente.

Aguadulce, Guanino o Huécija presentan un desnivel mucho mayor con respecto a los anteriores lugares, variando desde unos 300 metros, 500 o incluso 750, sin duda, solo apto para los que no tengan vértigos y sí muchas ganas de tener una de las mayores experiencias de su vida.

Sin importar la elección que elijas y más se adapte a los que estás buscando, siempre la organización te recomendará si el día elegido es el más óptimo para volar ya que sobre todo, depende de las características y las condiciones meteorológicas que haya. Se tratará simplemente de dejarlo para otro día.

Al reservar tu vuelo en parapente, te harán algunas preguntas como la edad (los menores siempre tendrán que presentar una autorización legal), el peso o si padeces algún tipo de dolencia que se vea afectada en el vuelo. En cuanto a la primera pregunta, la edad mínima para saltar dependerá de la empresa, ya que puede variar en función de su política interna. ¿Del resto? No te tienes que preocupar de nada más que de disfrutar al máximo la aventura por los aires.