Paseo a Caballo hasta Pinar de las Tinajas 1h 30'

No hay nada más tradicional ni más especial que atravesar, mejor dicho alcanzar, una zona de pinares, un paraje con una aureola mágica que nos transporta a otra realidad, subidos a lomos de un caballo, uno de los seres más nobles y dóciles del reino animal. Una experiencia que deja totalmente fascinado a todo aquel que lo prueba en alguna ocasión.

Y eso es exactamente lo que es venimos a proponer ahora, una ruta a caballo de una hora y media de duración en dirección al Pinar de las Tinajas, en la provincia de Valladolid. Y es que nuestra escuela de hípica se ubica en Villanueva de Duero, un diminuto municipio, a 30 minutos de la capital, desde el que sale esta excursión tan asombrosa.

Preparaos porque vamos a poner la casa patas arriba, como se dice coloquialmente. A lo largo de este tiempo, aparte de recorrer los campos característicos de la comarca, con pinares y encinas de enorme valor ecológico, pasaremos cerca de joyas arquitectónicas como el Palacio Bellavista, para bodas y eventos, o reservas naturales cerca del río Adaja.

Nos hemos propuesto llevaros hasta allí, en grupos de 2 a 12 personas como máximo, nosotros, que contamos con más de tres décadas de trayectoria en esto de la hípica y, por ende, de los paseos a caballo. Esta ruta es sencilla, aunque, de todos modos, adecuamos el ritmo al nivel de todos los participantes. No es lo único que haremos por vosotros.

También, pese a que es una travesía tranquila, idónea para aquellos que se inician en este mundo y nunca han cogido un caballo jamás, nos juntaremos antes del comienzo de la actividad para atender a las explicaciones de un profesional. No está de más oír consejos aplicables a la seguridad o recomendaciones a la hora de galopar a caballo. Porque lo más importante es que confiéis en nosotros.

Por otro lado, no puede haber excursión si no se entrega el material correspondiente para hacerla. Sin el equipo adecuado es imposible. Pero no tendréis que traerlo de casa o alquilarlo, os lo proporcionamos con anterioridad a la salida: nos referimos al casco de uso individual, a las riendas, a la silla de montar o al resto de elementos unidos al cuerpo del caballo.

Lo único necesario, por vuestra parte, para esa jornada es llevar zapatillas duras o de montaña, ropa de más o menos abrigo en función del mes en el que se haya reservado la excursión, pantalones que no queden demasiado ajustados (pueden ser vaqueros o mallas) y crema para protegerse del sol y evitar quemaduras.

Acercaos a conocer la fauna y la flora de esta increíble comarca desde una perspectiva diferente. Ya nos contaréis qué sentisteis cuando un corzo curioso apareció en medio del camino.