El imponente Pirineo, dentro del Principado de Andorra. Por si no lo sabíais, Grandvalira, en pleno centro del país, que se extiende a la frontera hasta casi tocar Francia con la yema de los dedos, es la estación de esquí más grande de todos los Pirineos, con la friolera de más de 210 kilómetros de pistas esquiables (24 verdes, 55 azules, 41 rojas y 19 negras). ¿A que no esperabais algo así?

Desde los debutantes que esquían por primera vez, a los que se hallan en un nivel de iniciación básico, pasando por los que se encuentran en un peldaño superior, en un nivel intermedio, o aquellos que ya se consideran esquiadores avanzados, de esos que dejan en ridículo al resto, estas clases están ideadas para satisfacer las peticiones de cada individuo de manera totalmente personalizada. Si tu propósito es destacar frente a tus amigos, pareja o familiares os aconsejamos contratar este servicio pro. Para que te dediquen atención exclusiva, sin que nadie más te robe el tiempo.

Por ello, obviando categorías y generaciones, hemos puesto a vuestra disposición dos clases de dos horas de duración que se imparten en dos jornadas consecutivas por nuestros monitores de formación demostrable. Y aunque no hay una edad mínima exigida para realizar la actividad bien se sabe que los especialistas recomiendan comenzar a esquiar entre los 3 y los 5 años, cuando los pequeños han crecido lo suficiente como para moverse con cierta soltura en la nieve.

Para redondear la experiencia, uno de nuestros monitores, sumos conocedores de los parajes de los Pirineos andorranos, se ha comprometido a cumplir una misión de vital importancia: dar a conocer a todo el que se acerque a su puesto y reserve las clases privadas con él algunos de los puntos más extraordinarios de la estación. 

Bajad junto a su compañía a toda velocidad por las pistas de nieve cristalina que se ajusten a vuestra destreza y no dejéis que nadie os lo cuente. Prometemos, prestamos juramento si acaso alguien lo precisa, que nunca defrauda. Todo lo contrario.

Grandvalira, el punto de encuentro de los aficionados a los deportes de invierno tales como snowboard, esquí o raquetas de nieve. Pero también de todos aquellos que aún están por comenzar a desarrollar una pasión venidera. Y, además, el lugar por antonomasia para esquiar en el Sur de Europa que congrega al público más exigente y más variopinto.

Infinitos kilómetros de superficie esquiable se extienden a lo largo y ancho de una estación que cuenta con siete accesos diferentes a pista. Acordándonos de todos ellos, de los recién aterrizados a este mundillo o de los más osados con las tablas de esquí, hemos acordado presentar nuestras clases particulares privadas. Consiste en una única clase de cuatro horas de duración concedida por un monitor experto a lo largo de una sola jornada en los horarios abajo fijados.

Aconsejable para todas las edades a partir de los 3 años y para todos los niveles independientemente de la maestría. Creednos, le puede sacar provecho cualquiera que se lo proponga, siempre hay algo nuevo que aprender. Asimismo, recordad que son nuestros instructores especialistas los que imparten la masterclass, lo que únicamente puede significar que el éxito está asegurado.

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