Si eres una persona de aventuras y, sobre todo de montaña, seguro que la escalada es una de tus pasiones, pero ahora bien... Una vez que estás arriba, ¿cómo regresamos abajo? La respuesta la tienes en mente y sí: la técnica de descenso en cuestión se llama rapel y gracias a esta, podrás volver a pisar tierra firme. 

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Antes de entrar en detalles sería bueno explicar para los más curiosos en qué consiste este deporte o técnica de montaña. Porque sí, para muchos es un deporte para disfrutar y para otros una técnica para bajar de las alturas cuando se practica senderismo, barranquismo e incluso espeleología, ya que hay muchas actividades que requieren de un descenso vertical

¿Es un deporte que puedo hacer solo?


Por lo general, el rapel es un deporte que se practica en grupo con el propósito de mantener una seguridad acorde con el tipo de aventura. Si tu perfil como rapeador es de principiante total, olvídate de practicar este deporte solo. Es mejor que mantengas cierto respeto y te pongas en manos de profesionales que conocen a fondo este deporte y que puedan así, ayudarte completamente. 

¿Qué equipo necesito?

Equipo colectivo

Como te acabamos de mencionar, por lo general es una práctica de grupo, ya que se apuesta por un deporte más seguro y divertido. Es por ello que, necesitarán una cuerda, mosquetones con seguro y al menos dos sin él y cinta plana o una cuerda para anclaje (puede darse el caso en el que la cuerda principal sufra algún percance y necesitarás otra para asegurar).
 

Equipo personal

  • Casco. No debes salir sin él, no sólo porque puedas tener alguna caída, sino también porque puede haber caída de piedras que al golpearte te causarían daño.
  • Guantes. Proteger las manos no es ninguna tontería. 
  • Descensor. Gracias a él te manejarás con mayor comodidad.
  • Arnés para la cintura o integral. Siempre debes estar bien sujeto.
  • Mosquetón con seguro. Suele ser de cierre automático con rosca de seguridad, pero también puedes encontrarlos con cierre de bayoneta.
  • Pata de anclaje o cabo de seguridad. Si hay algún lugar que esté expuesto, podrás preparar el rapel mejor. 

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La fricción...

Es la que te permite descender, ¿cómo? Mediante un sistema mecánico que dependerá de la experiencia que tengas o de la pared a descender. Puedes hacerlo con mosquetones, con sistemas de aseguramiento, con ochos o incluso otros instrumentos como los dreslers.

  • Ocho. Es el sistema más utilizado por excelencia y en el mercado encontrarás numerosos modelos (curvados, cuadrados, grandes, pequeños, con orejas...). Lo mejor es que uses el sistema clásico y pases la cuerda por el mosquetón de seguridad que une el ocho al arnés, pues evita problemas derivados de nudos como el de alondra.
  • Mosquetones. Es el sistema más utilizado, pudiendo ser sobre un mosquetón o sobre varios. Si usas un mosquetón (del tipo HMS unido al arnés) puedes utilizar dos técnicas: vueltas (rodeas el mosquetón con un mínimo de dos vueltas, aunque no es recomendable) y nudo dinámico (ofrece más juego y suele ser más seguro). Hay una técnica en la que se usan varios mosquetones, pero está en desuso al ser difícil de recordar.
  • Otros dispositivos. En la actualidad están surgiendo nuevos mecanismos como los Gri-Gris o el SUM, las placas Reverso, o sistemas de aseguramiento en solitario. Contar con un dispositivo que te permita asegurar y descender es mucho más práctico y seguro. También hay placas  y tubos que no ofrecen mucha fricción y por consiguiente deben usarse con un sistema de bloqueo (hay algunos que vienen con bloqueo automático y resultan más cómodos). Asimismo podrás encontrar sistemas como los dreslers o racks, muy utilizados por practicantes de espeleología.

El rapel es un deporte muy emocionante y recomendable para todos aquellos amantes de la montaña y la naturaleza. No dejes de practicarlo y recuerda que lo mejor es que vayas acompañado y con equipo en buen estado, pues tu seguridad es lo primero.