
Una nueva tendencia
Los cuartos de escape o "escape rooms" han tenido mucho éxito en los últimos años en México. Alrededor de 700 salas en todo el país con temas muy variados, ofrecen más de 1200 juegos como una nueva forma de entretenimiento en las ciudades. Este juego en equipo consiste en entrar a un cuarto con una ambientación temática, donde el objetivo es intentar salir, generalmente en menos de 60 minutos. Para lograrlo, tendrán que resolver acertijos y pistas para encontrar la salida entre todos los miembros del equipo.

Una actividad grupal que desarrolla la lógica y el ingenio. El conteo regresivo comienza, pero...
¿Qué es lo que atrae a las empresas para usarlos en sus procesos de selección?
Una nueva forma de innovar en los procesos de selección donde los candidatos enfrentan diferentes pruebas en tiempo real. Este tipo de reclutamiento permite evaluar el comportamiento del candidato en un ambiente laboral. El trabajo en equipo, la colaboración, la toma de decisiones, la comunicación o el lenguaje usado, así como las diferentes tácticas empleadas para alcanzar el objetivo.

Dependiendo del giro de la empresa, el juego de escape se enfocará en esa área, englobándose esta práctica en el término "gamificación". Aunque también se evalúa al candidato individualmente, las habilidades grupales son las más importantes. Gracias a estas dinámicas, los reclutadores pueden evaluar en conjunto la actividad y sacar conclusiones específicas para cada candidato. El objetivo final es conocer realmente a los aspirantes, algo que en las entrevistas tradicionales no siempre se logra.
¿Y cómo lo ven los candidatos?
Generalmente al principio se sienten sorprendidos y algo confundidos porque saben que están siendo observados y que cada movimiento, palabra o acción será evaluada, tanto positiva como negativamente. El objetivo para los participantes es salir, pero eso no es todo. Para los reclutadores el objetivo es observar y escuchar todo durante el tiempo que dura el juego.

Expertos en el área explican que los aspirantes terminan satisfechos, incluso dando una buena evaluación de la empresa aunque no hayan sido seleccionados.