Campamento Multiaventura en Bakio 1 o 2 Semanas

Llega el verano, con ello las vacaciones, y los niños y niñas están deseando que sus padres les apunten a un campamento para pasar tiempo junto a otros compañeros de juego con una edad similar. Honestamente, cualquier niño se merece, al menos una vez en la vida, venir a un campamento, algo indispensable en la infancia.

Pero lo mejor es cuando un campamento aprovecha el entorno para ofrecernos algo diferente, cosa que ocurre en nuestro campamento que se va a desarrollar a lo largo de una o dos semanas en Bakio, un pequeño municipio costero al norte de la provincia de Vizcaya. Ya sabéis, los niños de 10 a 17 años siempre seréis bienvenidos.

Los niños que opten por venir una semana tienen la posibilidad de escoger entre dos turnos, del 30 de junio al 7 de julio o del 7 al 14 de julio, mientras que para dos semanas habrá una única fecha del 30 de junio al 14 de julio. En cualquier caso, elijáis lo que elijáis, habréis acertado de pleno porque estamos hablando del campamento por excelencia. Por muchas razones que os vamos a detallar a continuación.

Primero, por la ubicación. Nuestro Albergue de San Esteban del Azetxo está situado a tan sólo 10 minutos andando de la playa. Tenemos la suerte de contar con un escenario privilegiado, el cual nos permite hacer actividades tanto acuáticas como de montaña como, por ejemplo, fútbol, baloncesto, kayak o surf. Como veis, las alternativas son variadas.

Por otro lado, haremos excursiones a diferentes puntos de la región, en bici o en autobús, para descubrir lo que depara un atardecer en San Juan de Gaztelugache u otros pueblos cercanos de interés. Tampoco faltarán las clases de artes marciales orientadas a mejorar la autoestima e impulsar valores como la confianza, la disciplina, el esfuerzo o la convivencia.

Otro de nuestros grandes alicientes son los talleres que ponemos a disposición de los más pequeños, podemos encontrar uno de lanzamiento de estrellas ninja y cuchillos, una guerra de pintura, una noche para preparar sushi, una tirolina, un puente tibetano de cuerdas en medio del bosque, sesiones de películas, discoteca, toboganes o, incluso, un talent show.

Por último, no menos importante, debemos destacar el papel de nuestros monitores y, en general, de todo el staff que conforman estos campamentos únicos. Tenemos un equipo de instructores cualificados, expertos en todas las disciplinas, desde los que imparten kenpo kai a los que dan las clases grupales de surf u otros deportes.

Del mismo modo, los niños se hospedarán en un albergue que cuenta con literas, con capacidad máxima de hasta 50 personas, con duchas de agua caliente independientes entre chicos y chicas, además de otros servicios. También cuidamos la alimentación de los asistentes, puesto que ofrecemos una dieta rica y variada con la inclusión de desayuno, comida, merienda y cena.

Creemos firmemente que todos estos motivos nos convierten en un campus especial. No lo decimos nosotros, lo dicen todos los niños que regresan a casa con una sonrisa inabarcable.