Las mejores inmersiones
El parque empieza en Retamar, a unos 15 kilómetros de Almería. El primer punto de inmersión está a la altura de Torre García y, a una distancia de unos 300 metros de la orilla aproximadamente. Se le conoce con el nombre de “La islilla de Torre García” y su fondo oscila entre los tres y los ocho metros.
A pocos metros, desde el mismo faro, se contempla uno de los paisajes más emblemáticos del parque “Los Arrecifes de las sirenas”. Se sale desde un pequeño baradero de apenas unos metros. La inmersión está resguardada por los arrecifes. No es problemática, a no ser por el mismo motivo que la anterior: las corrientes. Es mejor hacerla antes del mediodía y cuenta con una profundidad de diez a doce metros.
El pecio “Arna"
Bucear en pecios es una experiencia increíble. Sin dejar la zona, nos preparamos para la siguiente: tomando como referencia “La Laja”, partimos rumbo directo hacia Almería y estaremos haciendo el mismo rumbo que hace unos 65 años tomó el barco de vapor “Arna”, que tras chocar contra “La Laja”, se hundió dirección Almería. Hoy, gracias a este naufragio, podemos disfrutar de la que es sin duda la mejor inmersión de todo el Parque, “El vapor del Cabo de Gata”. Este pecio reposa perfectamente posado sobre un fondo de arena, hallándose su parte más profunda a 42 metros y la de menor profundidad a 25 metros, en el castillete de popa. La hélice es digna de ver, dicen que la Marina cortó el puente por ser peligroso para la navegación, posteriormente una empresa le desmontó los motores, quedando el barco prácticamente hueco. El recorrido por sus bodegas no es problemático: la carga que transportaba era mineral de hierro, la limpieza del agua hace posible contemplar algunos días el naufragio desde la superficie. Mucha atención a las corrientes que suelen ser muy fuertes.
“Los amarillos”
El siguiente punto, “Los amarillos”, se encuentra cerca de San José, siendo éste su punto de embarque más cercano, sobre un fondo de arena entre los 15 y los 23 metros; el nombre procede de su localización: se encuentra situado justo al frente de “Cala amarilla”, color de origen volcánico que junto con el basalto predomina en casi todo el litoral almeriense.
La siguiente inmersión está a la izquierda del puerto: es “Cala higuera” se puede acceder con coche por un camino muy malo de tierra, nadando desde una pequeña playa. Merece la pena ir por superficie hasta casi la punta, este recorrido transcurre siempre pegado al acantilado.
Desde este punto al siguiente que es en “los Escullos” no hay conexión por la costa, tenemos que retroceder y buscar la carretera de la “Isleta del Moro” y antes de llegar a la playa tomar la carretera de la derecha.
A la izquierda está “La Punta”, donde hay que nadar un poco más. Encontraremos grandes rocas y praderas de posidonias. Es aconsejable no pasar de los 15 metros, esto nos indicará que nos salimos de la zona. La ensenada del “Embarcadero” es idónea para los principiantes por su escasa profundidad.
Zona de los “Escullos"
Desde la zona de los Escullos y Cala Higuera hay un sinfín de sitios para la inmersión, todas ellas desde barco: su acceso desde tierra es totalmente imposible, sería muy larga la lista, los puntos mas destacados “El Chalet ”, “ La cueva del Francés”, “Punta Escullos”, “La Punta del Esparto”, “Cala Grande”, “Cala Chica”, “Los Islotes”, etc.
Abandonamos “Los Escullos” y partimos hacia “La Isleta del Moro”, pequeño pueblo de pescadores con vistas excelentes. La primera inmersión, muy tranquila y bonita, por la parte de levante bordeando el islote y vuelta al punto de partida, a través de un pequeño canal que lo separa de tierras. La profundidad oscila entre 10-12 metros.
Para la siguiente inmersión hay que desplazarse mar adentro; su profundidad va desde 28 a 40 metros, frente a la misma Isleta del Moro, se trata de la famosa “Piedra los meros”, en otro tiempo habitada por grandes meros, pero la pesca furtiva ha hecho estragos en ella, de todas formas merece la pena.
Una vez terminada la visita a la Isleta partimos para levante dirección Las Negras, carretera con mucha pendiente que pasa por “El mirador de la Amatista”. Podréis contemplar unas vistas maravillosas, después seguiremos para Rodalquilar, pueblo de antiguas minas de oro abandonadas no hace mucho tiempo.
Nada más pasar el pueblo y mucho antes de llegar a Las Negras, a la derecha, hay un camino de tierra. Al pasar por una rambla dirección a la playa llegaremos a El Playazo, con su castillo a la izquierda. Existen antiguas fortificaciones de defensa.
A la izquierda dirección Las Negras, está “La cueva de las palomas“. Es una cueva dentro de la montaña donde pueden entrar barcos de pequeño calado, pero cuidado: hay una piedra en el centro y puede tocar el motor. Poca profundidad, pero muy bonita.
Y enfrente se halla la Cueva, “Los Socabones” o “La Piedra del Rayo” entre 12-16 metros, grandes piedras sueltas en la pradera de posidonia.
Una vez pasado el pueblo, tenemos “El Cerro Negro”. Toda la ladera del cerro es muy buena hasta “Cala Hernández” con una profundidad de 10-15 metros, grandes rocas con algunas cuevas muy buenas.
Continuando hacia Carboneras, tendremos un largo trayecto hasta llegar al “Plomo” en la misma punta tenemos una inmersión bastante interesante, seguido de “Cala del medio” y a continuación el pueblo de Aguamarga.
Entre el pueblo de Aguamarga y Mesa Roldán está la “Punta de los muertos”. Se trata de una zona muy buena, aunque pegando a tierra prácticamente toda la pared es estupenda. Grandes saltos, grietas, cuevas y mucha fauna, profundidad para todos los gustos pero sin pasar de 20 metros.
Poniendo fin al Parque y frente al pueblo de Carboneras está la “Isla de San Andrés” y sus alrededores, profundidades que van desde 5-10 metros por su parte de tierra, hasta 25-30 metros. Fuera de la isla hay varios puntos de inmersión interesantes, pero de difícil localización, salvo que vayas con los centros de la zona.
En definitiva, decenas de estupendos puntos de inmersión para todos los niveles donde podrás disfrutar de estupendos encuentros.
