
Confiar en estos profesionales es tener las provincias gallegas a tus pies, pues te acompañan donde decidas según lo que quieras hacer. Esto es posible gracias a sus instalaciones ubicadas en el centro de la Comunidad, desde donde se desplazan a los puntos clave de la aventura. No podrían ponértelo más fácil.
En rafting, tres ríos mejor que uno
¿Irías a una tienda que solo vende un modelo de camisa blanca? Tal vez una vez en la vida esa prenda funcione para la boda de tu amigo y la compres, pero no necesitarás volver. Es un hecho que a todos nos gusta elegir, y el rafting está entre nuestras actividades favoritas de aventura. Entonces, ¿por qué conformarte con una empresa que te ofrece un descenso de un punto a otro sin más opciones? Con Desafío Turismo Activo, podrás bajar por el río Ulla, el Miño o el Deza y así repetir la actividad en escenarios completamente distintos.

En A Coruña se encuentra el tramo más sencillo, ideal para principiantes. El cauce del Ulla te recibirá desde Puente Sinde hasta Herbón. Compartirás la balsa con tus amigos sin problema, ya que tienen capacidad para 6 u 8 personas. Irán con ustedes un instructor que les dirá exactamente cómo manejar los remos frente a los rápidos que encontrarán en el camino. Son 3 horas de pura emoción sin parar, que comienzan alrededor de las 10:30 de la mañana. Lo que más te sorprenderá será cómo la balsa inflable se mantiene estable incluso contra las embestidas del agua.
Un poco más largo es el descenso del río Miño, que te tomará media hora adicional. Para esto, te reunirás con los guías en Pontevedra, justo donde está el Puente Internacional de Arbo, y es mejor hacerlo entre primavera y otoño, cuando el cauce está en su mejor nivel. Estarás hasta las 15:00 horas inmerso en la intensidad de unas aguas que sirven de frontera con Portugal.

Sube de nivel sin cambiar de provincia, probando el rafting en el Deza. Te lo recomendarán en época de lluvias si estás listo para un grado avanzado, que recorre Vila de Cruces y Silleda. Es justo lo que necesitas si ya probaste los dos descensos anteriores y sigues con ganas de más aguas bravas.
De puente a puente, saltando al vacío
Sería un mal ejemplo si, después de hablarte de lo bueno que es elegir para hacer puenting, solo te diéramos una opción. Pues sí, aquí también Desafío Ocio se luce, pues tiene autorización para saltar en dos puntos de Galicia con todas las garantías: uno en Pontevedra y otro en A Coruña.

Cómodamente, por la autopista que une Vigo con Ourense en dirección a Portugal, llegarás a Arbo, tu primer destino para enfrentar el vértigo. Solo necesitarás ropa cómoda y te sobrarán nervios, miedos y demás pensamientos. Estarás asegurado por dos cuerdas dinámicas y un arnés. Lánzate, toma un bolígrafo y tacha este momento épico de tu lista de cosas por hacer. Los saltos se realizan por la mañana y por la tarde, en grupos de al menos 6 valientes con quienes podrás compartir sensaciones antes y después de la experiencia.
Si estás más cerca de A Coruña y un metro más de distancia te parece demasiada espera para el puenting que tanto deseas, acércate a Noia y salta. Ahí usan el Puente sobre la ría de Muros como base para los saltos extremos que buscas. Y sí, decir "los saltos" en plural no es casualidad. Después de lanzarte por primera vez, te ofrecerán repetir por un precio mínimo. Sería una locura no aprovechar para lanzarte de nuevo.
Diferentes barrancos para distintos gustos y niveles
A estas alturas, habrás visto que las opciones de Desafío Turismo Activo crecen más y más con cada dato que te damos. Pues el barranquismo es donde su oferta se expande por completo, con una decena de itinerarios en los ríos gallegos.

El objetivo es doble: que conozcas múltiples cauces en provincias famosas por sus ríos, y que siempre encuentres uno acorde a tu nivel. El barranco de Almofrei es ideal si sabes nadar, pues es de nivel principiante. Está en Pontevedra, y son 4 horas en la zona de Ponte Caldelas, siguiendo el tramo cerca de Verdugo, rodeados de frondosa vegetación.
También hay descensos donde eliges el grado de dificultad dentro del mismo río. Es el caso del barranco de Cerves, en Melón, Ourense. Ahí puedes empezar con lo básico o subir a un nivel intermedio, extendiendo la actividad de 3 a 5 horas.
Los más expertos serán llevados a zonas como Riveiriño, en la Serra de Outes (A Coruña), donde los obstáculos son un reto exigente que se completa en hasta 6 horas.

Para bajar la adrenalina después de las actividades más extremas de Desafío Ocio, puedes seguir divirtiéndote con planes para toda la familia, como gymkanas y carreras que ponen a prueba tu sentido de orientación.
Después de conocerlos, ni siquiera dudarás a quién acudir para tu próximo regalo, ahora que tienes a quienes se encargan por ti de detalles esenciales como vuelos en ultraligero. En Desafío Turismo Activo son expertos en Galicia y en ti. ¿Con quién vas a estar mejor?