"El campamento en el Club Hipico Solera ha sido una experiencia a repetir sin duda.
Un lugar bien cuidado, los caballos bien tratados, un numéro reducido de alumnos, monitores con un enfoque cariñoso y muy respetuoso hacia la equitación como via de desarrollo del niño.
Los niños encantados y los padres tranquilos por saber que están en buenas manos."