Optar por un fin de semana diferente en el que disfrutar de lugares tan emblemáticos como el Alcázar de San Juan, El Toboso, Tomelloso o Madridejos, entre otros, no se compara con ningún otro lugar. Y es que Castilla-La Mancha guarda rincones que vale la pena visitar, al menos una vez en la vida.

Durante los dos días que dura este recorrido, les proponemos que olviden su vida cotidiana y se sumerjan en los escenarios que dieron vida a las aventuras y desventuras del ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha.
Hablar de cada una de ellas sería demasiado extenso e injusto, ya que el visitante conocerá una y otra indistintamente, encontrando ante sí un amplio abanico de actividades para elegir: podrá optar desde descubrir la Naturaleza manchega hasta la diversidad de monumentos y obras de arte que nos va presentando esta interesante ruta.

Por ese motivo, aquí les proporcionamos algunos datos generales de Castilla-La Mancha:
- Ubicación geográfica. Este itinerario atraviesa varias provincias de Castilla-La Mancha, una de las regiones más grandes de España. Con una superficie de 79,461 kilómetros cuadrados y 918 municipios, Castilla-La Mancha ocupa casi la totalidad de la Meseta Sur peninsular. Su posición estratégica en pleno centro de la Península Ibérica, al sur de la cordillera central, la ha convertido en uno de los principales destinos turísticos del interior elegidos por los españoles.
- Clima. Puedes disfrutar durante todo el año de un clima continental perteneciente a la llamada España seca. Las temperaturas promedio registradas han ido en aumento, manteniéndose la marcada diferencia entre máxima y mínima.
- Gastronomía. La variedad de productos que ofrece la zona ha dado origen a la famosa cocina castellano-manchega, basada en productos de la tierra. Algunos de los más característicos son: el queso manchego, de elaboración ancestral a partir de la oveja autóctona; el ajo y el azafrán; el aceite, cuya producción podemos encontrar en La Alcarria, el valle del Tajo, los Montes de Toledo, la Serranía de Cuenca, Mora, el campo de Montiel y las Sierras de Alcaraz; la miel; y, por supuesto, los vinos, cuyo cultivo abarca 70,000 hectáreas. Te recomendamos que realices una ruta de enoturismo en Ciudad Real.
- Artesanía. La gran habilidad de los artesanos castellanos es apreciable a través de distintos productos. Los encajes de bolillos de Almagro, la cuchillería de Albacete y Santa Cruz, la cerámica de Talavera de la Reina, Puente del Arzobispo e Hita, la espadería de Toledo o las alfombras de Cuenca son algunos ejemplos.
Los dos días que estuvimos ahí pudimos disfrutar de esto y mucho más, pues además de ver paisajes espectaculares puedes practicar actividades de turismo activo, como por ejemplo navegar en kayak. Un instructor nos explicó cómo usar los remos, ya que debes saber cosas básicas como girar o frenar.

Después de esto nos subimos a las embarcaciones por parejas y comenzamos a remar. Sinceramente es de lo más divertido que podrás encontrar, ya que la coordinación con tu compañero es esencial, pero hasta que la logras hay un rato de risas asegurado.
Por lo demás, puedes aprovechar para practicar otros deportes de aventura como senderismo, parapente, rutas 4x4, buceo... No esperes más para planear una excursión a las Lagunas de Ruidera con tus amigos, tu pareja o tus familiares, pues seguro lo disfrutarán mucho.