En este artículo trataremos de transmitirte la pasión por el esquí alpino y estamos seguros que después de leer nuestros consejos tendrás ganas de ponerte botas y esquís para disfrutar tú también de la sensación de deslizarte sobre la nieve.
Antes de lanzarte a las pistas de esquí debes considerar varios aspectos: seas o no principiante, debes estar preparado para protegerte de las agresiones físicas a las que estás expuesto en la montaña.
¿De qué estamos hablando?
Del frío y de los efectos del sol, que actúa sobre nuestro cuerpo con mayor intensidad porque sus rayos se reflejan en la nieve.
Por esta razón se recomienda encarecidamente el uso de cremas protectoras solares, incluso en días nublados, ya que también protegen del frío y del viento. También se aconseja usar gorros, bandas para cubrir las orejas, guantes impermeables (específicos para nieve), gafas homologadas (de sol y para niebla) y bálsamo protector labial.
Estas precauciones pueden evitar sorpresas desagradables -quemaduras solares, frío o problemas de visión- que podrían arruinar tu día en los esquís. Obviamente, la ropa adecuada -impermeable, transpirable y ligera- también nos protege de las inclemencias del clima. Puedes usar trajes enteros o conjuntos de dos piezas, que resultan más cómodos en momentos de descanso o cuando el frío no es extremo. Y lo más importante es el material "duro": botas, esquís y bastones.
Material duro
- Si eres principiante
No es recomendable perder tiempo visitando tiendas o llenándote la cabeza con mensajes publicitarios que te confundan sobre las características de un tipo de equipo u otro. En cualquier estación de esquí hay empresas de renta de esquís y equipamiento diverso, que te ofrecerán los materiales más adecuados para tu debut en la nieve. La opción de rentar el equipo es la más conveniente cuando aún no te has apasionado por el esquí y no sabes con qué frecuencia practicarás este deporte.
Además, las primeras veces es común dañar el equipo y las empresas de renta ya contemplan esta posibilidad. Otra ventaja de rentar esquís es la posibilidad de probar diferentes tipos de materiales para elegir los que mejor se adapten a tus características físicas. Deja que los profesionales del ramo te asesoren sobre el equipo que necesitas y reserva toda tu concentración para aprender a esquiar.
- Si eres novato
Una vez que hayas probado el esquí, será momento de decidir si conviene seguir rentando el equipo o comprar uno propio, dependiendo de la frecuencia con que pienses practicar este deporte extremo que nunca pasa de moda.
