Los deportes de aventura están ganando mucha popularidad y cada vez somos más los aficionados a actividades como el karting, donde la velocidad hace que nuestros niveles de adrenalina se disparen y nos olvidemos de nuestros problemas cotidianos durante unos kilómetros. Si ya estás cansado de rentar el mismo vehículo cada fin de semana o te gustaría tener uno propio pero la situación económica no te permite comprarlo, lo más sencillo es fabricar el tuyo.

El orgullo y la emoción de saber que podrás manejar un kart fabricado por ti lo vale todo. Pero lo primero que debes hacer es seguir todos los pasos para llegar a ese momento. Te daremos los consejos necesarios y, de ser posible, sin que te arruines. Así que toma nota porque ¡empezamos!


Podrás competir con tus amigos

 

No te vamos a mentir, necesitas tiempo, espacio para comenzar a construir el kart y ganas de hacerlo, aunque también es cierto que cuando tienes un pasatiempo, cualquier momento es bueno para dedicarle. Por eso vamos a comenzar por buscar un lugar para trabajar. Lo ideal es encontrar un taller o garaje, ya que te permitirá tener las herramientas a la mano sin ocupar mucho espacio. Además, conforme el kart vaya tomando forma, necesitarás un lugar para guardarlo.

Pero, "vender la piel del oso antes de cazarlo" nunca es buen consejo, así que comenzaremos haciendo una lista con todos los materiales que necesitas para la construcción de tu go-kart

Pasos para fabricar un kart casero

1. Reúne todos los materiales necesarios para el kart. Busca en tu casa tubos que puedas tener o ve a un depósito de chatarra donde podrás encontrarlos en buen estado.

Para fabricar un kart necesitarás:

  • Tubo cuadrado de 9 m y aproximadamente 2.5 cm de diámetro.
  • Varilla de acero redonda de 1 m y con unos 2 cm de diámetro.
  • Varilla de acero de 2 m y 1.5 cm de diámetro.
  • Tabla de madera con largo y ancho un poco más grandes que el motor, pero con un grosor de 0.5 cm será suficiente.
  • Un motor de motocicleta o incluso de una podadora que ya no uses te servirá. Preferentemente que sea de dos tiempos, con o sin caja de velocidades (con él podrás alcanzar hasta 130 km/h).
  • Placa/s (dependiendo de cuántos asientos quieras que tenga el kart) de madera o metal. Lo que prefieras.
  • Otra placa del mismo material que hayas elegido para el/los asientos, para la base del kart.
  • Cadena para que el motor engrane con la rueda.
  • Tornillos y arandelas.
  • Tanque de plástico para la gasolina.
  • 4 llantas.
  • 1 volante.
  • Caja de velocidades.
  • Freno de mano.
  • Eje de dirección.
  • Un pedal para el freno y otro para el acelerador.
  • Consigue o pide prestado un soldador para unir las piezas de la mejor y más fácil manera.
  • Sierra o cualquier otra herramienta que te sirva para cortar las piezas con precisión.

* Importante: corta los materiales con precisión para que después encajen sin problemas. Medir y marcar los tubos para que sean lo más exactos posible es fundamental.


Sigue las instrucciones paso a paso



2. Ten a la mano un plano del kart que vas a fabricar o una maqueta. Es la mejor manera de organizarte y seguir el orden de la construcción del vehículo. Por supuesto, si no se te da tan mal el dibujo, puedes animarte a diseñar tu propio plano, siguiendo algún modelo que te guste y adaptando las medidas que te mencionamos al kart que vas a armar.

3. Pasando a la colocación de todas las piezas para que el kart funcione correctamente, te recomendamos trabajar en un espacio amplio donde tengas las piezas a la mano y puedas trabajar cómodamente, como un garaje o patio.

- Corta los tubos y suelda primero todo lo relacionado con el chasis para formar la estructura del kart por partes y así te sea más fácil. El chasis es lo principal, ya que engloba no sólo la carrocería sino toda la estructura mecánica interna. Gracias a él, el vehículo podrá ponerse en marcha y tú podrás presumir, una vez terminado, tu buen gusto en cuanto a combinación de colores y detalles. Soporta tanto piezas principales como auxiliares y suele tener un diámetro de 30 ó 32 cm. Debes considerar que, al fabricarlo, los karts no tienen suspensión, a diferencia de otros vehículos, por lo que debes procurar que sea lo más flexible posible.

- Lo más recomendable, especialmente si conseguiste el motor en un deshuesadero, es probarlo antes porque seguramente lleva tiempo sin encenderse. Pero también podrás usar un motor de podadora o cortacésped, por ejemplo.

- Es importante que la barra de transmisión sea resistente, pues de ella dependerá el motor (que es bastante pesado).

- Presta especial atención al soldar el motor, ya que de ahí dependen el resto de las piezas como los frenos, la tracción o el cableado. Pero no olvides asegurarte de que, además del motor, el embrague, la dirección y el freno queden completamente fijos una vez soldados. Las llantas te permitirán avanzar, pero en el mercado encontrarás muchos modelos, siendo el clima un factor clave para tomar la decisión. Dependiendo del estado de la pista, necesitarás llantas para seco o para mojado.

- Cuando vayas a instalar el eje trasero, debes cuidar un detalle al máximo: asegúrate de que el árbol esté en posición y paralelo correcto a las dos llantas delanteras, de lo contrario podrías tener serios problemas con la dirección y la duración de las llantas.

- Los pivotes centrales, los brazos de dirección, el acoplamiento de la barra de la pista o el brazo de la gota son elementos importantes, ya que con ellos el chasis irá tomando forma y adquirirá una estructura lo suficientemente estable como para que estés más cerca de tener tu propio kart.

* Si no estás muy familiarizado con el uso de herramientas, no te preocupes, pues casi todo podrás hacerlo sin experiencia previa. Eso sí, en ciertos momentos no tendrás más remedio que pedir ayuda a alguien con los conocimientos necesarios para echarte una mano.

4. Una vez que tengas todas las piezas soldadas y tu kart pintado a tu gusto, llegará el momento de encenderlo y te sorprenderás de haber creado tú mismo este vehículo del que te sentirás especialmente orgulloso.


Fabrica el modelo que más le guste

Construir un kart nos llevará mucho tiempo, pero seguro que vale la pena. Si no te sale al primer intento, no te rindas; la emoción que sentirás al competir con tu propio auto de carreras será increíble. Pero, aparte de eso, siempre puedes pedir consejo a expertos o ir a un circuito de karting y ver cómo funcionan estas máquinas. Seguro que hay alguna pista cerca de ti, y si no, da clic aquí y revisa todas las opciones que tienes para manejar un kart profesional antes de salir al asfalto con el tuyo.