Introducción
Cuando Todd llegó a Inglaterra, siendo todavía un desconocido, ganó Badminton. Ya entonces se empezó a hablar de él. Los ingleses, los dueños del concurso completo, no podían creer que este granjero, tan sencillo y sin pretensiones, lograría convertirse en el ídolo mundial montando a caballo en el concurso completo, y les costó mucho rendirse ante su talento.
Un granjero desconocido llega a Inglaterra
Por otra parte, en la época en que Mark llegó a las islas, era aún más difícil convertirse en número uno, pues estaba la incomparable Lucinda Prior Palmer, la reina de Badminton (ganó seis veces con seis caballos diferentes); Mark Philips; la también excepcional Gini Leng y muchos otros jinetes que acaparaban la atención, como el escocés Ian Stark con el gran tordo Murfy, que hacía que los enormes saltos a caballo de Badminton parecieran pequeños y que podía dar dos trancos donde otros daban cuatro. Tampoco debemos olvidar la expectación que generaba la princesa Ana, integrante del equipo británico y olímpica en Moscú.
Aun así, el jinete neozelandés se convirtió en el más admirado, no solo por los aficionados, sino por los dueños de caballos y los propios jinetes.
Doble campeón olímpico con Charisma
Mark Todd ganó la medalla de oro individual en Los Ángeles y, cuatro años después, la repitió con el mismo caballo en Seúl. Algo impensable que lo consagró como jinete, pero también como entrenador de su caballo Charisma.
Pero el "kiwi" nunca aflojó el acelerador y lo ha ganado todo. Ganó Badminton 3 veces y Burghley 4 veces, obtuvo medalla de oro por equipos en el campeonato mundial de Estocolmo y en el de Roma, donde también logró plata individual. Triunfó en salto, ganando el Gran Premio de Hickstead, entre otras pruebas, y fue olímpico en Barcelona. Saltaba con la misma facilidad y naturalidad que en el concurso completo. Un "feeling" reservado solo para las estrellas.
El mejor jinete del siglo en concurso completo
Todo esto lo ha consolidado como el mejor jinete de concurso completo del siglo, con unanimidad, y muchos lo consideran el mejor del mundo. Si hubiera competido en doma clásica, sin duda habría ocupado un lugar destacado.
La sencillez de Mark Todd
Aun así, Mark conserva su imagen de granjero, feliz y relajado, aunque detrás de esa apariencia se esconde una equitación impecable y el instinto de un ganador nato.
Se sabe que Mark está en una competencia, no porque busque destacar, sino porque donde él está, están las cámaras.
Todd y los jinetes españoles
Mark Todd tuvo relación con jinetes españoles. Santiago de la Rocha, cuando decidió incursionar en el concurso completo internacional—algo inédito en España—logró que Todd lo entrenara y asesorara. Fue una gran elección: en los 80 y hasta Barcelona 92, compitió a alto nivel, logrando las mejores clasificaciones en Badminton y un campeonato mundial para un jinete español, además de ganar el tres estrellas de Punchestown.
También entrenó caballos de Álvarez Cervera y Revuelta. Carlos Campón, tras dejar su puesto en Somosaguas para trabajar con Álvarez Cervera en Atlanta, pasó más de tres años con el neozelandés, llegando a ser responsable de su cuadra y ayudando con caballos jóvenes.
Sídney, su última gran competencia. Los caballos de carreras
Tras Sídney, donde no pudo montar a su mejor caballo, Word for Word, por lesión, logró bronce individual con Eye Spy, cerrando con broche de oro su carrera.
Mark Todd se retira de la competencia y se establece en Nueva Zelanda para dedicarse a criar y entrenar caballos de carreras, otra de sus pasiones. También ha competido y ganado en carreras, especialmente de obstáculos. Aunque dice que solo competirá con jóvenes para prepararlos, quizá, como a los toreros, le pique el gusanillo y regrese. Pero si lo hace, seguro volverá a brillar.
Nos despedimos con agradecimiento por haberlo admirado como persona, jinete y hombre de caballos. En el concurso completo, habrá un antes y un después de Mark Todd. Hizo historia.
