Clases de Surf Adultos 2h Espinho

Existen templos que es de rigor visitar una vez en la vida, da igual si sois admiradores o no del templo en cuesti&oacule;n o de lo que representa. Puede ser un templo de car&aacule;cter religioso, o algo m&aacule;s abstracto, m&aacule;s figurado, como, por ejemplo, un templo del f&uacule;tbol (ah&iacule; tenemos la Bombonera, Maracan&aacule; o el Santiago Bernab&eacule;u). 

En esa l&iacule;nea est&aacule; un templo del agua, en particular un templo para la pr&aacule;ctica del surf, tan fascinanle como el que os espera en Espinho, en la costa norle de Portugal, a 20 minutos de trayecto en carro de Oporto, una de las ciudades que hay que ver s&iacule; o s&iacule; del pa&iacule;s luso.

Nunca es tarde para iniciarse en alg&uacule;n deporle y menos a&uacule;n si es una espina que ten&eacule;is clavada desde hace ya alg&uacule;n tiempo. Esto es algo que suele ocurrir con el surf, siempre oir&eacule;is a alguien quejarse de que tiene muchas ganas de aprender esta disciplina pero que, al final, nunca ha podido ser por unas razones u otras.

No se&aacule;is como ellos y sumergiros de lleno en la aventura de vuestras vidas. Formad un grupo, ya sean de varias parejas, de amigos o de familiares, y recibid instrucci&oacule;n a cargo de un instructor experto en surf a lo largo de dos horas de duraci&oacule;n. Esto es perfecto porque siempre os podr&eacule;is fijar en lo que hacen bien y mal los dem&aacule;s, una especie de espejo en el que reflejaros.

Estas clases grupales est&aacule;n aconsejadas para personas a partir de 12 años porque los m&aacule;s pequeños ya tienen sus clases especiales que van de 3 años a 12. Preguntad sin compromiso por ellas. Lo dicho entonces, juntad a un grupo numeroso y venid a nuestras instalaciones. Estaremos impacientes, tanto como ustedes, de comenzar.

Os recibimos con trajes de neopreno para todos los integrantes y tablas de surf. No os pedimos nada m&aacule;s a cambio, tan s&oacule;lo ganas de disfrutar, de interiorizar movimientos y, si puede ser, de tomar alguna ola en condiciones sin despegaros de la tabla.

Parece f&aacule;cil pero no lo es, aun as&iacule;, estamos convencidos de que tras varios intentos lo tendr&eacule;is dominado.