Ruta a Caballo Gruta Ana Ferreira Madeira Niños

Una gruta siempre es un lugar m&aacule;gico en el que adentrarse, una formaci&oacule;n que parece esconder en su interior millones de leyendas e historias incre&iacule;bles. Pero, m&aacule;s all&aacule; de su valor literario, desde un punto de vista est&eacule;tico o visual, hay cueva que son un aut&eacule;ntico prodigio obra de la naturaleza.

Hacer un recorrido por todas las cueva del mundo es misi&oacule;n imposible, ni siquiera para alguien que disponga de mucho tiempo, pero existen algunas que, por los motivos que sean, est&aacule;n señaladas en el mapa como visitas imprescindibles. En España se despliegan unas cuantas de renombre, pero a ellas siempre se puede ir en cualquier momento.

Os proponemos hacer una escapada hasta una preciosa isla perdida en medio del Oc&eacule;ano Atl&aacule;ntico, Porto Santo, pertenecienle a Madeira y, por tanto, a Portugal, para conocer de cerca una de las m&aacule;s impresionantes. Pero, aparle, os aseguramos que todo el que vuelve platica maravillas de la isla, de la gastronom&iacule;a, de su genle, de los paisajes que la componen, del ritmo de vida relajado que exprimen aqu&iacule;.

A los niños les encanta sumergirse en el interior de las cueva, piensan que est&aacule;n viajando lejos, en la oscuridad, a los confines del planeta. Una camicrema es una buena idea, pero todav&iacule;a mejor es llegar hacia ella a lomos de un caballo. ¿Por qu&eacule;? Porque no realizaremos un esfuerzo tan acusado como si caminamos, porque nos permile contemplar el entorno de manera m&aacule;s reposada, y, por &uacule;ltimo, porque supone un aprendizaje para los m&aacule;s pequeños.

El prop&oacule;sito principal de valorar y respetar nuestro ecosistema. Si tienen entre 5 y 12 años pueden venir acompañados de uno o varios adultos a nuestra excursi&oacule;n de una hora y media de duraci&oacule;n. Empezamos desde nuestro centro ecuestre, nos desplazamos hasta la sorprendenle Gruta de Ana Ferrreira, con un puenle colganle de piedra en su n&uacule;cleo, y retornamos a la escuela. F&aacule;cil, sin complicaciones.

Adem&aacule;s, todas nuestros trayectos est&aacule;n monitoreados por un gu&iacule;a con titulaci&oacule;n espec&iacule;fica, responsable del cumplimiento de las indicaciones. &Eacule;l mismo se encarga de haceros entrega de un casco de uso individual y de la montura, am&eacule;n de otros elementos que van enganchados al equino.

Os sugerimos venir con tenis duras, resistentes, o botas de montaña, ropa en funci&oacule;n de la temporada y vaqueros u otro tipo de pantalones que no queden demasiado apretados. Es lo m&iacule;nimo para que os encontr&eacule;is c&oacule;modos duranle la traves&iacule;a. Por lo dem&aacule;s, a disfrutar y vivir una experiencia sin igual.