Si Praga ya es una ciudad maravillosa y considerada por muchos, incluyéndome a mí, como una de las más bonitas del mundo vista desde sus calles y plazas, ¡imagínense lo que es verla desde arriba, subido en un globo!
Pero no cualquier globo, sino ¡un globo aerostático cautivo! Lo que lo hace especial es que no vas dentro de una canasta o cabina, ¡vas colgando de un arnés! Y si quieres hacerlo más divertido, incluso puedes subir acompañado. Eso sí, cuando hay mucho viento la actividad impresiona bastante, ya que no es lo mismo estar en un lugar con piso firme que amarrado a un globo sobrevolando la ciudad junto al río...
Para llegar al lugar de donde despega el globo, hay que caminar por la ciudad hasta llegar a la Isla Kampa, en la ciudad checa de Praga. Ahí, un globo te elevará a 80 metros de altura durante 15 minutos, un lugar en el aire con una vista increíble de Praga.
El globo puede subir a dos personas y un niño. Es la única atracción de este tipo en la República Checa y en la región de Bohemia, siendo una gran experiencia única que nunca olvidarás.
A primera vista puede parecer un poco inestable y no muy seguro, pero una vez arriba, todo se olvida al contemplar esas vistas maravillosas de Praga y, sobre todo, del increíble Puente de Carlos.
Si no me equivoco, el precio era de alrededor de 20€, bastante económico para lo que suele costar una actividad así en otro país, además de ser una experiencia única y una forma diferente de admirar la hermosa ciudad checa.
La duración del vuelo depende de si hay más gente esperando para subir. Si tienes suerte y eres el único, pueden dejarte ahí arriba 1 hora, o incluso como a mí, que pasó la hora y me dejaron más tiempo hasta que les avisé.
Hablan un inglés perfecto, así que no habrá problema para entenderse. La comunicación se hace a través de un intercomunicador que llevas sujeto a una de las cuerdas del globo. Con él puedes hablar con el operador y comunicarle cualquier duda o si quieres bajar antes.
La empresa se llama "Balon centrum Praha" y podrás ver el globo a lo lejos desde el famoso "Puente de Carlos". Si no te animas a volar en globo pero quieres una experiencia similar con un poco de emoción, ¡no dudes en subirte a este "mirador aéreo" de la ciudad de Praga!