El turismo de aventura cada vez es más popular y una de las razones es porque te permite descubrir un mundo de sensaciones únicas. Libera adrenalina y adéntrate en plena naturaleza.

Recomendaciones para el buceo en cuevas submarinas


Para practicar buceo en cuevas podemos adentrarnos en grutas inundadas ubicadas en zonas interiores, pero también existen cuevas submarinas con acceso directo desde el mar y, en otros casos, se ubican en zonas cercanas a la costa pero sin comunicación directa con ésta (Cueva del Agua en Cartagena).

Baja a las profundidades


La principal característica de este tipo de inmersiones es que se realiza bajo un techo real y, en caso de surgir algún problema, no es posible salir a la superficie de manera directa.

Otra característica importante es la ausencia total de luz natural, lo que obliga a ir equipados con sistemas de iluminación. Por este motivo, el riesgo para el buceador es alto ya que cualquier emergencia que ocurra bajo el agua deberá resolverse siempre en el lugar donde se presente; siendo necesario un entrenamiento previo para poder solucionar cualquier contratiempo.

Antes de iniciar en la práctica de esta actividad, es recomendable tomar un curso de buceo específico donde se adquieran los conocimientos y técnicas adecuadas (correcta instalación del cabo guía, características del equipo a utilizar, normas de seguridad a seguir, etcétera) además de simular los principales incidentes que pueden ocurrir y cómo resolverlos.

Cueva submarinas


Modalidades del buceo en cuevas

Buceo en grutas.
Inmersiones en cavidades sin superar los 70 metros de recorrido, no rebasando los 30 m de profundidad, además de ser inmersiones sin descompresión y en las cuales siempre se ve la salida.

Espeleobuceo.
Toda inmersión en una cavidad que rebase cualquiera de los límites establecidos en el buceo en grutas o que, por las características particulares de la gruta, no sea recomendable para buceadores sin la preparación adecuada (en algunas de estas grutas se advierte del peligro mediante señalamientos informativos). Es una disciplina extremadamente técnica, que requiere amplia experiencia y el uso de equipos especiales, con el objetivo de alcanzar metas específicas (como iniciar la exploración de una gruta inexplorada).

Precauciones que deben tomarse para bucear en cuevas submarinas

  • Tener conocimiento y entrenamiento previo en buceo en cuevas subacuáticas.
  • Programar y planificar con anticipación la inmersión, recabando la mayor información posible sobre el lugar donde se realizará el buceo.
  • No exceder el límite de 70 m de recorrido ni entrar en descompresión.
  • No bucear en grutas sin hilo guía, que deberá indicar la distancia recorrida y la dirección de salida.
  • Utilizar dos reguladores independientes y, de ser posible, dos equipos independientes (dos tanques con su respectivo regulador y manómetro cada uno).
  • Respetar los límites de consumo de aire, regla de 1/3 para la ida y dos tercios para el regreso y seguridad, por lo que debe quedar una reserva de aire al final de la inmersión de 1/3.
  • Llevar los dos reguladores cerca de la boca.
  • Llevar iluminación suficiente para la inmersión: tres equipos de luz por buceador con una duración mayor al tiempo de inmersión cada uno, con interruptor para usarse alternativamente.
  • No bucear en grutas propensas a enturbiarse (al levantar los sedimentos del fondo con las aletas, desprendimientos del techo por efecto de las burbujas de los reguladores, al posarse en el fondo, etcétera).


Aleteando en el fondo del mar

  • Bucear entre dos aguas manteniendo un control adecuado de la flotabilidad.
  • No bucear en galerías estrechas.
  • Ante cualquier duda o incidente, abandonar la inmersión.
  • Existen en nuestro país un número considerable de grutas accesibles para la mayoría de los buceadores, pero no por ello deben ignorarse las medidas de seguridad mencionadas ni dejar ningún detalle a la improvisación.

Principales causas de accidentes en el buceo en cuevas

La inexperiencia, no seguir las normas de seguridad y la temeridad pueden causar accidentes que, en este tipo de inmersiones, pueden ser fatales. En un alto porcentaje estos accidentes se deben a errores humanos y, en pocos casos, a fallas del equipo.

Preparados, listos, ¡ya!


La mayoría de estos accidentes dependen principalmente de los siguientes factores:

  • Una formación técnica inadecuada para este tipo de inmersiones.
  • Uso incorrecto del cabo guía; soltarlo durante la inmersión o no llevarlo.
  • Manejo incorrecto del consumo de aire al no seguir la regla de los tercios.
  • Iluminación insuficiente: regresar sobre un cabo guía sin luz puede tener consecuencias fatales para un buceador no entrenado en esta técnica. Por tanto, se debe evitar el exceso de confianza, no sobrepasar nunca nuestras limitaciones y no subestimar los riesgos; lo que nos permitirá realizar inmersiones placenteras y seguras en lugares de tan fascinante belleza.