Los karts, como cualquier otro deporte, tienen un reglamento que hay que seguir, puesto que de lo contrario podrían surgir problemas y los pilotos sufrirían las consecuencias.
No solo hay que seguir unas normas con respecto al comportamiento, sino que además tenemos que ser conscientes de que los materiales que usemos tienen que estar homologados y en perfectas condiciones.
El Reglamento Deportivo del Karting tiene una serie de pautas de obligado cumplimiento en todos los circuitos y competiciones de karts. Entre otras, señalaremos las más importantes; el resto, las puedes consultar en la página web de la RFEDA (Real Federación Española de Automovilismo).
El reglamento se puede resumir en los siguientes aspectos: seguridad general, circuito y conducción deportiva.
Seguridad general
Como el hecho de no llevar herramientas o repuestos ni hacer reparaciones en la pista, en caso de estar implicado en un accidente, no debéis abandonar el lugar sin autorización previa, además de pasar por el correspondiente reconocimiento médico si así se requiriese, etc.
Nunca circular en kart fuera de la pista, a no ser que haya una de entrenamiento; el organizador ha de tener todas las medidas de seguridad al día; los pilotos deben llevar todos los elementos de seguridad requeridos según el Reglamento Técnico.
Circuito
Solo los participantes inscritos y aquellos que tengan autorización pueden acceder a la pista. Efectuar el paso por boxes con la máxima precaución o recibir ayuda mecánica solo en esta zona. Cualquier kart que se detenga en pista ha de ser retirado inmediatamente de ella; la incorporación a la pista debe ser por los propios medios del piloto, sin ayuda externa y sin entorpecer la marcha del resto de compañeros…
Conducción deportiva
El kart puede circular por toda la pista, pero siempre y cuando no entorpezca la marcha del resto de vehículos; sanción para quienes efectúen diversos cambios de dirección sobre la pista para evitar ser adelantados por otro kart, entre otras.
Bien, ya tenéis unas nociones básicas. Puede parecer que la normativa sea muy estricta o que encontréis muchísimas reglas a seguir, pero en el momento en el que comencéis a practicar todo irá sobre ruedas, y ¡nunca mejor dicho!
