El buceo es un deporte acuático pensado para todos aquellos amantes de la naturaleza que quieren huir de las actividades convencionales. Esto es así porque el mundo del submarinismo no tiene nada que ver con lo que podemos conocer a pie de tierra, ya que se trata de descubrir especies no visibles en las grandes ciudades, donde por suerte o por desgracia vivimos.

La rapidez del día a día es algo que en determinados momentos nos obliga a hacer un alto en el camino y pensar un poco en tomarnos un respiro. Es entonces cuando en los ratos libres nos decantamos por practicar actividades de aventura, por ejemplo, donde deportes como el buceo están presentes.


Dispón de todo lo necesario para bucear

Pero como no todos nacemos sabiendo, hay que seguir una serie de recomendaciones para poder lanzarnos a las profundidades marinas. Una de las cuestiones más importantes a tener en cuenta es escoger una buena escuela de buceo, pero siempre y cuando sepamos a ciencia cierta que estamos en óptimas condiciones para practicar este deporte.

Hay algunas consideraciones que tenemos que saber, como por ejemplo estar en buena forma física. Con esto no nos referimos a que habitualmente hagas ejercicio sino que tengas una buena salud.

Los problemas más habituales son los relacionados con el oído, ya que el agua es un medio en el que las presiones se notan fundamentalmente en esta parte del cuerpo y si ya contamos con pequeños achaques podemos sentirlo mucho: pérdida de la capacidad para oír o vértigo grave.   

Pero hay otras enfermedades que nos impiden practicar este deporte náutico: asma, depresión, diabetes, epilepsia, hipertensión o incluso el embarazo puede verse afectado por las variaciones de presión, etc. Además si estamos tomando medicamentos tenemos que tener especial cuidado al no ser que el doctor nos haya garantizado que no hay problemas.


Asegúrate de que estás en buenas condiciones físicas

Durante el reconocimiento médico previo al bautismo de buceo o al inicio de un curso de buceo nos realizarán una serie de pruebas que, por lo general, consisten en:

  • Talla y peso
  • Exploración
  • Anamnesis (donde se reúnen todos nuestros datos: personales, genéticos, familiares, deportivos)
  • Espirometría
  • Electrocardiograma basal
  • Prueba de esfuerzo submáxima en un cicloergómetro progresiva y sin gases, donde se controla la tensión arterial.


Reconocimiento médico previo

Es necesario que el día en el que vayas a hacer el reconocimiento médico lleves una analítica de sangre, una timpanometría y una radiografía de tórax. Ir con ropa deportiva, no haber realizado ejercicio físico intenso el día anterior o no comer copiosamente antes de acudir a la prueba son algunas recomendaciones que se nos piden. De este modo nos aseguraremos que realizamos bien el examen y los resultados son los correctos.

Si tienes dudas de si podrás o no bucear o de dónde acudir a realizar el reconocimiento médico, acude a una empresa de submarinismo y te darán la información que necesitas.